La autora del libro “Piel más joven en 28 días») (que se prevé superventas, como en sus anteriores publicaciones), afirma que hay productos que potencian el envejecimiento y debemos eliminarlos de nuestra dieta.

Una alimentación adecuada puede tener un impacto positivo para la piel, además de mejorar la salud y disminuir males como la hipertensión, los problemas cardíacos o la diabetes.

Ya sabemos que por lo general, cuando nos aplicamos una dieta recomendada por un nutricionista eliminaremos el peso que le sobra a nuestro cuerpo, pero podemos al mismo tiempo mejorar la evolución de nuestra piel.

Es lo que plantea Karen Fischer en su libro «», donde sostiene que gastar dinero en costosos productos de belleza en realidad no tiene sentido, si quien se los aplica no pone atención a los alimentos que se lleva a la boca.

Según la nutricionista en el mercado existen muchos productos que son directamente culpables no sólo del envejecimiento prematuro, que también de la decoloración, de la aparición de líneas profundas y de la flacidez de la piel.

Se trata de los denominados «productos de glicación avanzada», que hoy los dermatólogos consideran como los más importantes impulsores del envejecimiento.

Uno de ellos es el azúcar, pero Fischer también describe otros como las carnes rojas, los lácteos y los alimentos procesados. Aunque no solo habla de los alimentos que se ingieren, sino de la importancia de la preparación. Freírlos, asarlos, ahumarlos o pasteurizarlos, aumenta el impacto en el envejecimiento. Es por eso que recomienda cocerlos lentamente y a temperaturas bajas para evitar que se oscurezcan, especialmente aquellos alimentos que son ricos en grasas y proteínas.

De esta manera, la clave para quitarse años de encima estaría en disminuir el consumo de los productos antes mencionados y aumentar aquellos que naturalmente favorecen la salud de la piel, como frutas y vegetales de colores oscuros, las legumbres y los cereales integrales.

Entre sus consejos destaca que es conveniente agregar líquidos sobre todo antes de cocinar la carne o el pescado, marinarlos en limón. Aliñarlos con diferentes especies como la canela, el clavo de olor, jengibre, comino, la cúrcuma, etc. Aconseja hacer uso del vinagre de manzana para disminuir los niveles de azúcar en la sangre.

Karen Fischer propone una dieta con la que asegura que en pocas semanas se logra que la piel se vea más joven y además ayuda a disminuir la celulitis y entre otros beneficios a eliminar las arrugas, a combatir la resequedad, a evitar el daño solar, mejorar acné, las manchas que aparecen a medida que la edad avanza y la hiperpigmentación.

La nutricionista sitúa a este régimen en 28 días, porque ese es el tiempo que se demora el organismo en reproducir nuevas células en las capas más profundas de la piel y que éstas lleguen hasta la superficie.

Esta dieta comenzará con tres días de desintoxicación, en los que deben evitar consumir carne, cafeína y se deberá aumentar la ingesta de frutas y de vegetales, preferiblemente crudos. Posteriormente a estos tres días, se comenzará con un patrón de alimentación muy saludable en que de manera lenta podremos reincorporar la cafeína en cantidades pequeñas, pollo y pescado.

El consumo de alcohol, de azúcar y de lácteos, está prohibido.

La nutricionista recomienda comenzar el día, con un buen desayuno y la mitad de los platos del almuerzo y de la cena, deberán contener vegetales, ¼ de proteínas (pollo, pescado, legumbres) y además ¼ de carbohidratos (patatas, arroz basmati, espelta o quinoa).

En cuanto a los postres, sugiere frutas ricas en antioxidantes, granadas, plátanos, papayas, frutos rojos o guayabas.

Sin olvidar beber a diario ocho vasos de agua, o te de hierbas, o zumos de vegetales frescos. Hay que tomar suplementos de Omega 3, manganeso, magnesio, zinc, calcio, cromo y vitaminas C, D, B3 y B6.

Karen Fischer, comenzó a investigar sobre este asunto, poco después del nacimiento de su hija, a la que se le desarrolló un eccema grave. Karen diseñó un programa de dieta que logro hacer desaparecer esa enfermedad de la dermis de su hija.

Se especializó en la salud general de la piel y eccema, y diseña recetas y planes de comidas para tratar una variedad de trastornos de la piel. Actualmente, prepara programas de salud en línea para los que sufren esta enfermedad de piel.

La aparición de su primer libro tuvo repercusión en todo el mundo, obteniendo reconocimientos de toda índole. Cada una de sus nuevas ediciones se traduce en éxito literario.